Protestamos. Protestamos porque no tenemos trabajo. Porque no tenemos un futuro claro. Porque no tenemos representantes dignos de ello. Protestamos porque no tenemos miedo, porque no tenemos nada que perder, pero ante todo, protestamos porque tenemos dignidad.
Es verdad eso que dicen de España, que somos pasotas, que lo aguantamos todo... pero después de aguantar y aguantar nos cansamos. Resulta que nos hemos cansado ya.
Ahora van a ver lo que es nuestra generación.